A pocos días presentar su más reciente libro “99 lugares encantados en los que pasar una noche en vela”, el autor se ha consagrado en el público, como uno de los periodistas que más ha escrito sobre lugares que tienen una característica muy especial, vivir el miedo. Esa emoción tan intensa, que logra ponernos en alerta de cada centímetro de nuestro cuerpo, para que no nos suceda nada, pero eso sí, generando en nosotros una experiencia inolvidable.
Al igual que John Quidor, que pintara a mediados del siglo XIX lugares encantados o Edgar Allan Poe, que escribiera cuentos de terror, Lorenzo Fernández Bueno, con cámara y bolígrafo, ha logrado reunir sitios que se antoja conocer, al menos para pasar una noche, donde el miedo estará presente hasta erizar la piel.
 |
| Ichabod Crane huyendo del Jinete sin Cabeza, en el camino de Sleepy Hollow (John Quidor-autor) |
Periodista y Director de la revista Enigmas, en esta entrevista, nos presenta su más reciente libro, así como diversos misterios que lo han cautivado, en su larga trayectoria como investigador de estos temas.
Entrevista
Para muchos de nuestros amigos lectores su nombre es por demás conocido, dirige exitosamente la revista Enigmas y su novela “El Vampiro de Silesia” fue un éxito rotundo en librerías; pero bajo su particular punto de vista, ¿cómo se definiría usted?, ¿cómo es Lorenzo Fernández Bueno, con respecto al periodismo de misterio?
Imagino que un curioso de todo, alguien al que le gusta comprobar que nunca hay una sola opción para explicar a las cosas, y que está convencido de que todo se puede contemplar desde múltiples perspectivas. Soy un apasionado de mi trabajo; es una vocación que despertó siendo muy niño y que hace que día a día me levante dando gracias por poder trabajar en aquello que más me gusta.
Periodismo y misterio son dos líneas que ha reunido muy bien en sus libros. Podría comentarnos ¿cuándo nace su gusto por el misterio?
Prácticamente desde que tengo razón de ser y existir. Lo que pasa es que los años me han llevado hacia algunas temáticas que me resultan más interesantes, dejando a un lado otras que de pequeño me fascinaron, como los casos de apariciones, de espectros, de largos pasillos iluminados tenuemente por los que en ocasiones se deja ver una dama de blanco y se oye alguna que otra cadena… en fin, esas deliciosas historias propias de la novela gótica.
Hoy la ilusión despierta en mí cada vez que planifico un viaje, pensando en los misterios que allí me voy a encontrar. Imagino que en ello han tenido gran influencia los libros de grandes como J.J. Benítez, o de aquel que fue mi mentor, Fernando Jiménez del Oso, que descubrieron a la gente de mi generación un mundo amplísimo y repleto de enigmas, que alguien sembró en el pasado más remoto, y que personajes como él nos trajeron al presente.
Su libro anterior, sin duda es muy atractivo, no solo por su título, que es muy sugerente, también lo es, porque se trata de una novela. Se titula “El Vampiro de Silesia”, que ya pueden adquirir nuestros amigos en formato digital en las librerías más importantes de México, puede comentarnos, ¿qué lo llevó a escribir esta novela y que podrán encontrar en ella?
Como periodista y escritor, ha dado a conocer a sus lectores, grandes secretos, entre todas las investigaciones que ha realizado, ¿cuál ha sido la más significativa, aquella que más lo ha intrigado?
Siempre digo que la más significativa, la que más me ha de intrigar, por la que siento mayor entusiasmo es la que está por venir. Normalmente cuando realizo una investigación, me motiva mucho la búsqueda de datos, la preparación del viaje antes de partir, la organización sobre el terreno, entrevistas, etc… Y cierto es que mi pasión por estos temas me lleva a vaciarme completamente. Por eso cuando inicio una nueva es como volver a llenar el tanque de la ilusión; como empezar de nuevo. Y hay algo que de momento despierta a cada nuevo planteamiento: esa misma ilusión, algo que creo que es importante mantener.
Ahora bien, si tuviera que destacar una, precisamente porque permanece inconclusa, esa sería la búsqueda que años atrás iniciamos en la profundas selvas del Amazonas peruano, siguiendo un mito llamado Paititi –El Dorado de los conquistadores–, porque estamos convencidos de que esta ciudad –que no era ni es de oro– existió, y está ahí aguardando a que alguien la descubra. Nosotros tenemos datos suficientes para pensar dónde se puede encontrar. Por eso ya estamos preparando una expedición para 2015 con el firme objetivo de llegar. Y además así tendremos una nueva excusa para volver a América; quienes me conocen saben que soy un auténtico enamorado de América Latina. Ya veremos…
 |
| PAITITI |
Bueno, dar el salto del ensayo a la novela ha sido interesante. Nunca me planteé hacer algo así; no al menos hasta que no tuviese nada que me llevase a ello; algo que contar… Y ese algo llegó en el mes de marzo de 2009, cuando los medios de comunicación anunciaron el hallazgo en la isla veneciana de Lazaretto Nuovo de una fosa común con más de 1.500 cuerpos del tiempo de las terribles epidemias de peste. La cuestión es que sólo uno de ellos mostraba unas características muy singulares: tenía un ladrillo incrustado en la boca, al punto de que había desencajado la mandíbula. Aquella mujer –porque se supo tras los análisis que era una mujer– fue sometida a un suplicio inhumano, y todo porque, tal y como determinaron los arqueólogos forenses, la consideraron un vampiro en su tiempo .Esta historia me fascinó, y me puso tras la pista de algunos grandes personajes del pasado, algunos ligados a la Iglesia, que hicieron lo imposible por alcanzar un sueño: ser inmortales. Y para ello orquestaron una serie de expedficiones a los países del este de Europa en los que se decía que vivían una criaturas demoniacas de las que, además, se decía que eran eternas. Esto es una pequeña parte de lo que va a encontrar el lector… pero hay más.
 |
| Vampiro de Silesia
Los enigmas históricos, son una de sus grandes pasiones, al menos así lo deja entrever en varias obras como son los de “Crónicas del Misterio”, “Desafíos a
Pues os diría que, si bien es cierto que mi explorador de cabecera es el coronel Percy Harrison Fawcett, que desapareció junto a su hijo y a un amigo de éste en el año 1926 mientras buscaba en la región del Matto Groso de Brasil lo que él mismo denominó como “ciudad perdida de Z”, siento una enorme admiración por la épica de Ernest Shackleton cuando en el 1916 logró salvar a sus compañeros de viaje de una muerte segura, tras permanecer casi dos años varados en tierras antárticas. Su aventura para ir en busca de ayuda y regresar para salvarlos, ahora mismo, cuando escribo esta misma línea hace que se me erice el vello.
Hace algunos días, presentó su más reciente libro, “99 Lugares Encantados”, ¿podría decirnos de que trata?
Salió en este mes de junio, es un libro que aúna mis dos grandes pasiones: los viajes y el misterio. Se titula “99 lugares encantados en los que pasar una noche en vela”, y es un trabajo ilustrado con más de 150 fotografías a color, de enclaves con historias muy sólidas detrás, pero sobre todo de una belleza paisajística extraordinaria… especialmente cuando cae la noche.
Si alguno de nuestros amigos quiere conocer más sobre usted, ¿a que sitio web puede dirigirse?
En unas semanas abriremos la web www.revistaenigmas.com, así que estén atentos porque vamos a empezar fuerte y con muchas sorpresas.
En redes sociales, ¿cómo pueden buscarlo?
En nuestro muro de Facebook: Lorenzo Fernández nos pueden encontrar. En él nos reunimos más de 260.000 seguidores, destacando por encima de todos los países mi querido México. Allí la gente tiene la mente muy despierta a estas temáticas; hay más tolerancia. Y en twitter, LorenzoFBueno por supuesto Revista Enigmas.
¿Algún mensaje que quiera mandar a los amigos lectores?
Ya que me dais la oportunidad me gustaría agradecer el interés y el apoyo que desde ese lado del mundo siempre nos hacéis llegar a quienes trabajamos en la redacción de la revista ENIGMAS. Es extraordinario comprobar como, a pesar de la distancia, nos une la pasión que sentimos por determinadas temáticas. Así que gracias de corazón a vosotros por acordaros de nosotros, y a todos vuestros lectores porque ese apoyo al que antes me refería nos motiva para seguir adelante, a la búsqueda de nuevos enigmas…
|
